lunes, 22 de octubre de 2012

1.

Me gustaría prometerme a mí misma que habrá un momento en que la felicidad no será pasajera. En que sabré sobreponerme a las situaciones y salir adelante, quizá no con una sonrisa, pero sí con una lección aprendida. Espero que llegue el momento en el que un solo aspecto de mi vida que no funcione correctamente, no condicione todos los demás, haciéndome dudar de lo más mínimo. Hasta de lo que tenía por seguro. Y no es que haya empezado a dejar de creer en las cosas, sino que las cosas han empezado a dejar de creer en mí. Quizá esto sea culpa mía. Quizá sea quien lo ha desencadenado todo. Quizá esto estaba tan cerca de la superficie que una pequeña llamarada ha podido arrasarlo todo. Y lo peor no es darme cuenta de que me esto me incumbe totalmente, de que he estado tan sumamente concentrada en mi vida que he descuidado todo lo demás, sino el saber que él jamás reconocerá su parte de culpa. Jamás tendrá remordimientos de conciencia por aquello que está destrozando. No estoy segura siquiera de que se haya dado cuenta de todo lo que ha provocado.

D.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Welcome to my life.