Me gustaría pasar todo mi tiempo
contigo. Suena tonto. Muy tonto. Lo sé. No creas que no pienso en ello. Pero
cada vez que hablo contigo se me olvida todo. Lo bueno. Lo malo. Lo interior y
lo exterior. Ya puedo estar odiando al mundo o a mí misma, que siempre te acabo
sonriendo embobada. Tú. Todas las cosas que dices. Cómo me haces sentir. Pasar
de dudar sobre mis sentimientos, sobre cómo sería amar a alguien, a vivirlo
cada segundo. Saber lo rápido que ha pasado todo. Lo rápido que puede seguir
pasando. Y rememorar cada momento contigo, para acabar sabiendo que desde el
primer momento me quedé corta en caricias, besos y abrazos. Que me falta tiempo
contigo. Que quisiera repetirte una y otra vez que te quiero. De verdad. Que me
encantan todas y cada una de las cosas que haces. Que cuando me miras sin decir
nada se me acelera el corazón. Que te echo de menos. Cada día.
Lo sé.
Muy tonto.
Te lo dije.
Pero es que pasar mis noches contigo suena demasiado bien...
No hay comentarios:
Publicar un comentario